Un día mágico

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_dsc9109Y con una brisa más fresca de lo que acostumbra principios de septiembre, se me viene a la cabeza un momento único que vivo desde que tengo uso de razón. Ese momento en el que uno se levanta nervioso porque sabe que no es un día cualquiera sino un día que inicia algo que para nosotros es lo máximo y por lo que vivimos cada día de nuestras vidas.

Es septiembre y aún así siento ese momento a flor de piel, cierro los ojos y me veo ahí, camino al centro alrededor de las 10 de la mañana, porque este día es diferente y mágico donde todos sentimos algo más de lo habitual.

Desde que me despierto estoy nervioso, pero lleno de alegría porque en un par de horas voy a ser el hombre más feliz del mundo. Para eliminar tensión bueno es ver a nuestros hermanos rezando donde mejor sabemos, en los varales, donde forjamos nuestra fe, donde hemos crecido y donde nos estamos haciendo hombres. De nuevo digo, es septiembre, pero me huele a otro día donde lo vivo en familia.

Pocas horas faltan ya, a punto de escuchar a Bomberos, pero mientras, se escucha el bullicio de la calle, porque es un gran día, un día donde vuelvo a ser niño y disfrutar como nunca. Toques de aviso, se hace larga la espera pero todos nos miramos inquietos porque sabemos que en breves sentiremos un amor incondicional, y un lugar de paz infinita.

Dos toques, uno, suena el Himno y se escucha al tumulto festejando. Dios padre hecho hombre sale a la calle a pasear y a redimir al pueblo de Málaga. Todos a una como hermanos, con los pies al ritmo del latir de un solo corazón, su corazón, que nos da todo su amor y todo lo que necesitamos. Dios padre está en la calle y nosotros vamos a una agradeciéndole toda su labor de un año entero de escuchas y de ayudas.

¡Viva Nuestro Padre Jesús del Prendimiento!

Alex BTT

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